Llega la Semana Santa y muchas personas aprovechamos los días de asueto para tomar unos días de descanso y viajar, dentro y fuera del país, visitar Antigua Guatemala o el Centro Histórico y ver procesiones o para quedarnos en casa juntarnos con amigos. Sin embargo, esto implica que nuestras rutinas alimenticias y de ejercicio también se ven afectadas. Por esto, te compartimos tres consejos para que disfrutes tus vacaciones y al mismo tiempo te mantengas activo.

1. INTEGRA TU LUGAR DE VACACIÓN CON EL EJERCICIO

Aprovecha lo que ofrece el lugar en el que pasarás tus vacaciones para mantenerte activo. Por ejemplo, si vas a la playa o a un lago, puedes aprovechar para nadar, practicar kayak o aprender a surfear. Si, por otro lado, decidiste ir a ver procesiones, trata de dejar tu auto lejos y caminar de una a otra. O, si te quedaste en tu casa, aprovecha que muchas personas están fuera de la ciudad, por lo que es más fácil y seguro salir a correr o montar bicicleta por las calles. Si vas a descansar en un lugar alejado como una montaña,  puedes practicar una rutina de yoga, y por supuesto conocer los alrededores practicando un poco de montañismo. Si estás en un hotel, averigua si cuenta con gimnasio y/o si ofrecen actividades de recreación y deporte. Si estás visitando una ciudad nueva, sácale el jugo al máximo conociéndola a pie o en bicicleta.

2. MANTENTE HIDRATADO

No descuides la cantidad de agua que tomas diariamente y, si estarás en algún lugar especialmente caluroso, ten en mente que es importante tomar más agua que de costumbre. Una buena idea, es mantener siempre contigo un pachón de agua, así te aseguras de estar tomando la cantidad de líquidos que tu cuerpo necesita y no contaminas el medio ambiente con botellas desechables.

3. TRATA DE TOMAR LA OPCIÓN MÁS SALUDABLE

Si vas a un restaurante o estás en un hotel en el que no tienes la opción de preparar tus alimentos, trata de ver qué opciones de comidas te ofrecen y elige la más saludable. Esto no significa que no puedas darte un placer y disfrutar un pedazo de pizza o un postre delicioso, pero hazlo con moderación. Trata de tomar decisiones inteligentes, por ejemplo, elige vegetales al vapor en vez de papas fritas; pide carne o pescado asado, en vez de frito y toma agua pura en vez de bebidas carbonatadas o jugos artificiales.

Como ves, es posible disfrutar unas vacaciones sin acabar con el trabajo que has venido haciendo para estar en forma. También pueden ser un excelente momento para empezar un estilo de vida más saludable, si te das cuenta que lo importante es la actitud y el decidirte a hacerlo.

Con información CDAG

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